La movilidad eléctrica esta compuesta por aquellos vehículos que usan motores eléctricos para generar la locomoción, reduciendo la huella de carbono en las ciudades e incentivando el uso de la movilidad sostenible. Es el futuro de la movilidad urbana, ya que ayuda a mitigar los efectos del cambio climático y evita las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a la atmósfera, mejorando así la calidad del aire de nuestras ciudades.
La movilidad eléctrica lleva evolucionando en España desde hace más de una década. Está cambiando nuestra forma de movernos, fomentando la movilidad sostenible gracias a las múltiples ventajas que nos ofrecen, como son el ahorro de carburante y que no generan emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.
Vehículos eléctricos
El concepto de movilidad eléctrica está cada vez más arraigado en nuestra sociedad, donde los vehículos eléctricos son el eje central del sistema de la movilidad eléctrica. Los vehículos eléctricos se propulsan de forma total o parcial mediante la energía eléctrica procedente de baterías que se recargan de la red eléctrica.
Según la tipología de vehículos eléctricos que existen, los podemos dividir en:
- Vehículos eléctricos puros: Se propulsan mediante uno o varios motores eléctricos. Funcionan gracias a la energía procedente de la red eléctrica a través de un punto de recarga.
- Vehículos eléctricos híbridos enchufables: Se propulsan mediante un motor eléctrico o un motor térmico y su batería se carga de la red eléctrica.
- Vehículos eléctricos de autonomía extendida: Son coches eléctricos alimentados por una batería que incluyen un pequeño motor de combustión auxiliar cuyo objetivo principal es recargar la batería.
Los niveles de demanda cubren la oferta de los vehículos eléctricos, los cuales se pueden en los siguientes tipos:
- Vehículos de movilidad personal(bicicletas, patinetes…) que se utilizan para desplazamientos urbanos cortos.
Vehículos ligeros multiplaza (motocicletas y coches), que se utilizan para desplazamientos más largos o para el transporte de varias personas.
Ventajas de la movilidad eléctrica
Las principales ventajas que nos ofrece la movilidad eléctrica son:
- Eficiencia: Los vehículos eléctricos convierten en movimiento el 60% de la energía en el combustible o tomada de la red, lo que supone una eficiencia tres veces superior respecto a los vehículos de combustión.
- Etiqueta 0: Al tener la etiqueta 0, los vehículos eléctricos tienen más ventajas que los vehículos de combustión en las grandes ciudades. No tienen problemas para aparcar ni para circular. Además, pueden ir por los carriles BUS y VAO.
- Evita las emisiones directas de gases de efecto invernadero: Los vehículos eléctricos no contaminan, esa es su principal ventaja. Reducen las emisiones de gases GEI en más de un 65% a diferencia de los vehículos de combustión. Reducir las emisiones de CO2 que se acumulan en la atmósfera es una de las ventajas más significativas a la hora de limitar el calentamiento global.
- Ahorro en consumo y mantenimiento: El coste de combustible para un vehículo eléctrico es de aproximadamente 2 euros cada 100 kilómetros, frente a los casi 8 euros cada 100 kilómetros que consume un vehículo de combustión. El coste de mantenimiento es inferior, ya que no disponen de elementos como aceites, correas o filtros.
- Mayor comodidad a la hora de conducir: La conducción es muy sencilla y silenciosa al ser parecido a un coche automático. A diferencia de los vehículos de combustión, no dispone de marchas ni de embragues.
- Reducción de la contaminación acústica: El 80% de la contaminación acústica de las ciudades se produce a causa del tráfico. Los vehículos eléctricos, a velocidades inferiores a los 50 km/h, producen mayores reducciones de ruido.
- Mayor fiabilidad que los vehículos de combustión: Los vehículos eléctricos son más simples y tienen menos componentes que los vehículos de combustión. Esto supone una mayor fiabilidad respecto a los vehículos tradicionales.
Futuro de la movilidad eléctrica
La movilidad eléctrica no para de evolucionar con el paso del tiempo. Esto supone que tenga nuevos usos -los aviones, barcos y camiones eléctricos se encuentran en fase experimental- y sea cada vez más eficiente.
Gracias a esta evolución, está recibiendo más apoyo a nivel mundial mediante políticas públicas como la electrificación del transporte público urbano. En conclusión, la movilidad eléctrica no va a estar de paso en nuestra sociedad, sino que ha llegado para quedarse. Es el futuro del transporte mundial, puesto que es más eficiente y sostenible con el medio ambiente.